Me encanta comer verduras de temporada, son mucho más sabrosas, y si además tenéis la gran suerte, como es mi caso, que son de cosecha propia... ¡TODO UN LUJO!. Esta receta surge de la desesperación al ver la nevera llena hasta los topes y tener que improvisar algo con urgencia. Es lo que tiene producir, todo viene de golpe, así que tienes que hacer muchas cositas para poder sacarle provecho a esas verduras o frutas tan ricas ricas. Cuando viene la judia verde... ya sabes el menú del día, cuando vienen los pimientos, pepinos y tomates... gazpacho al canto, cuando vienen los melocotones... mermeladas, helados, postres y más postres! JA JA JA!!!. Pero estoy encantada de la vida, el día que tenga que comprarlos... notaré la diferencia, en sabor y, como no, en dinerito je je je!!!.